I.- JESÚS EN EL HUERTO DE LOS OLIVOS, Marlén La Rosa. “El Amor es sanación”
“En la estación "Jesús en el huerto de los Olivos " quiero trasmitir el sufrimiento de Jesús en esa noche larga y llena de soledad donde él sabía lo que venía y todos se retiraron y con indiferencia absoluta todos se durmieron mientras el sufría. Todavía sucede. Solo el amor nos salvará.”
II.- JESÚS TRAICIONADO POR JUDAS, ES ARRESTADO, Alicia Belden. “El Beso de Judas”
La estación que me corresponde interpretar es aquella en que Judas, uno de los apóstoles, traiciona a Jesús, su maestro, vendiéndolo por unas monedas, la traición, por lo tanto es el eje central de mi trabajo para esta nueva edición de Paisaje Pasión y Sagrado y al que titulo: “Beso de Judas”.
Busco con mis personajes, que dibujo previamente para luego pasar a digitalizarlos, representar al discípulo que vende a su maestro, destacando a Judas con el color encendido del rojo, así como coloco el mismo color en la cabeza de los soldados, unificando en el tono la traición. Coloco al traidor a la espalda de Jesús, que es un modo de representar al hipócrita y malvado que vende al amigo. A Jesús lo coloco en el centro de la composición y de un tamaño mayor que los otros personajes para enfatizar su importancia y al resaltarlo con el traje negro, hago contraste con el rojo. Judas se escuda u oculta a la espalda del maestro, proyectándose hacia adelanto para besarlo, de un modo que pareciera mostrar inocencia y protección, pero que no es más que un disfraz hipócrita para realizar la más vil de las acciones: la traición a su amigo entregándolo a sus enemigos con un beso, símbolo del amor. Y, como ocurre en tantas ocasiones, el vil, trata de ocultarse con el disfraz de la inocencia, se viste de apariencia: con un beso, gesto de amor y amistad Judas entrega a su Maestro, a su amigo. Y sabe cubrirse las espaldas: pues junto a él y atraídos por él, vienen soldados armados.
En resumen la esencia de lo que quiero representar está enfatizada en el tamaño y colores de las imágenes, así como el lugar que ocupan en el plano.
III.- JESUS ES CONDENADO POR EL SANEDRIN, Natalia Procopovich. “Soy Yo”
Esta obra me lleva a reflexionar sobre la condición humana, a buscar lo sublime en una simple imagen que como símbolo entrega un mensaje que trasciende lo visible. Un fragmento de la imagen de Jesús, un gesto tan simple y común y a la vez con tanto poder: una mano que señala y condena a muerte... En ella, el ayer se hace presente y la humildad reposa y espera en gamas de colores sepias.
IV.- JESÚS ES NEGADO POR PEDRO, Harry Schuster. “Todos somos Pedro”
A través del tiempo, se ha determinado que el color blanco es la ausencia y carencia de color y forma. Por eso esta estación del Vía Crucis que trata del momento en que Pedro niega tres veces a Jesús, es como decir que no existe,…. Como el blanco.
Así el color exterior a Cristo, en mi propuesta, es como nuestro pensamiento que le da forma a lo conocido o lo desconocido.
V.- JESÚS ES CONDENADO POR PILATOS, Anna Fioravanti. “Ecce Homo”
Con mi interpretación quiero evidenciar y representar, con las manos cuyas cuencas contienen agua que cae para convertirse en sangre, a los hombres y mujeres, cuya indiferencia o pasividad ante las tragedias de sus semejantes, se convierten en causa de condena de la vida de muchos justos e inocentes que son doblegados y humillados. La silueta de la cruz que se proyecta en un imaginado pavimento, representa en mi trabajo el dolor terrenal. El área delimitada en forma de Cruz es símbolo de fronteras donde la violencia y la inseguridad imperan ante la indiferencia y elegimos pensar que no nos corresponde velar por su vida y que su dolor no nos pertenecían, y sin saberlo, nos convertimos en Pilatos. La corona de espinas es el símbolo de la humillación y al mismo tiempo del dolor, por lo tanto de la injusticia y el escarnio. Las palabras que rodean mi trabajo, que pueden ser leídas a partir de cualquier punto, son el hilo que nos traslada en el tiempo y el espacio y que nos hacen saber que si el tiempo y el espacio no son el mismo de la lectura, el ser humano permanece inmutado en la injusticia ante el dolor humano, en el tiempo y en el espacio.
Pilatos podemos ser todos, y siendo así, alguna vez podemos llegar a ser Hecce Homo
VI.- JESÚS ES FLAGELADO Y CORONADO DE ESPINAS, María Helena Rodríguez. “Te duele a Ti, me duele a Mi”
“….El número de golpes recibidos asciende aproximadamente a unos 120, sin contar los que no se han podido estudiar por faltar parte de los brazos a causa del incendio de 1532. Algunos autores no se ponen de acuerdo a la hora de precisar si los golpes se dieron con flagelos de tres ramales o de dos; en cualquier caso es evidente que fueron romanos los que lo azotaron. Estos no tenían tope en el número de golpes, y lo que es más estremecedor desde el punto de vista médico: Nuestro hombre debió quedar bañado en sangre y hecho una llaga. El dolor, tanto físico como moral, y la incipiente fiebre que debió apoderarse de él y que ya lo abandonaría hasta la muerte, debieron hacer una tremenda mella en su cuerpo.”
Me interesa a través de mi interpretación mostrar a Jesús en ese doloroso momento, donde estando amarrado y colgado de una columna se sometió al padecimiento de los golpes, maltratos y humillaciones, a lo más doloroso, con sus consecuencias físicas que fueron extremas, sin compasión fue tratado, pero él con Dios, con su Padre….resistiendo.
Cargó con nuestros dolores, fue aplastado por nuestras iniquidades. Con sus heridas curará nuestros pecados. Concederá a los que son despreciados injustamente o marginados, a cuantos han sido desfigurados por la tortura o la enfermedad, comprender que, crucificados al mundo como él lo estuvo, llevaran a cabo su PASIÓN PARA LA SALVACIÓN DE TODOS
“Jesús, pedazo de humanidad profanada, en ti se revela el carácter sagrado del hombre: arca del amor que devuelve el mal con el bien.”
VII.- JESÚS CARGA LA CRUZ, Piera Reverón. “¿Por qué estrecha es la puerta y angosto el camino?”
La Cruz representa cada experiencia, sentimiento, aflicción y debilidad humana. En esta imagen se representa un hombre abrazando la cruz, aceptando sus debilidades y actitudes para redimirse sin agobiar a otro u otros
VIII.- JESÚS ES AYUDADO POR EL CIRINEO A LLEVAR LA CRUZ, Gabriela Láscaris. “Y la ayuda llegó del cielo”
Una representación idealista de las bellas y grandes aves que han surcado el cielo y que a través del tiempo nos han dado lecciones de amor, unión y solidaridad que los humanos ignoramos, cuando las bajas pasiones nos invaden y nos mueven a ser crueles, aun suponiendo una “inteligencia” que debiera marcar la diferencia. Vemos en el reino animal, verdaderas razones para “humanizarlos” y ponerlos a nuestra “altura” como aliados de la naturaleza vuelan y se desplazan en grupo incluso los menos sociables han descubierto las ventajas de reunirse para comer, cazar, viajar y protegerse cosa que aún ignoramos los humanos
IX.- JESÚS CONSUELA A LAS MUJERES DE JERUSALEN, Tania Zambrano. “Por el Dolor Ajeno”
Jesús con su sacrificio redimió al mundo; a pesar que su dolor y sufrimiento era muy grande encontró la fortaleza para consolar a las mujeres que estaban muy tristes y llorando por su estado lamentable
Jesús, de esa manera nos dice que seamos solidarios, no pensemos solo en nosotros mismos, tener presente que los demás también tienen sus necesidades y por lo tanto tenemos que confortarlos y brindarle apoyo, ayuda y consuelo
También habla con sentido profético, como cuando les dice a las mujeres que no lloren por él, lloren por ustedes y por sus hijos que serán afectados por los males que sufrirá la humanidad, refiriéndose a los conflictos bélicos que habrán de venir en el mundo
X.- JESÚS ES CRUCIFICADO, Gustavo Zajac. “El Grito”
Siempre que se ha querido representar el momento de la crucifixión de Jesús, se realiza utilizando una imagen gráfica del acontecimiento, casi, como un reportaje y visualización fotográfica de la situación.
Es por eso que, utilizando una fotografía y tratando de unir la concepción de la Iglesia de representar el dolor que significó para Jesús el acto de la crucifixión que he tomado la imagen gráfica de lo que es para mí la representación del “dolor” y al mismo tiempo tomar una fotografía que es el elemento plástico por excelencia para la transmisión de un acontecimiento en nuestros días.
La selección de un grito como representación de dolor, de horror y de su sufrimiento fue establecida a lo largo de la historia del arte y es aún mucho más conocida la obra de Eduard Munch “el grito”; la diferencia en este caso y haciendo relación a la religión, al mensaje de la Iglesia y a la situación actual es que he seleccionado una imagen fotográfica de un grito emitido por mí.
XI.- JESÚS PROMETE SU REINO AL BUEN LADRÓN, María Esther Barbieri. “Los buenos siempre ganan
El Buen Ladrón, es uno de los dos malhechores que según los evangelios fueron crucificados al mismo tiempo que Jesús “acuérdate de mí cuando llegues a tu reino" dijo el buen ladrón y Jesús le respondió: "Te lo aseguro: hoy estarás conmigo en el paraíso." Esto es lo que relata la XI Estación, y lo que represento a través de imágenes digitalizadas es una colina con tres cruces donde la cruz central se apoya, soporta o se une a la cruz de su derecha mientras se aleja de la izquierda sobre una alfombra que remite al tejido de nuestros indígenas que suelen representar rayos, nubes, soles, estrellas, cruces, cielos, ríos, lagos, montañas, plantas, animales, personas, ideas conectadas con la vida o con la muerte, particularmente relacionados con los héroes culturales y personajes de los relatos míticos. El arte indígena expresa la génesis de una existencia cotidiana milenaria y de una religiosidad defendida a través de siglos de perenne intervención. El miedo y la valentía se conjugan para enfrentar al indio con su medio, alcanzando la satisfacción de sus necesidades materiales y espirituales, que con orgullo extrae de la memoria colectiva de su etnia, al lograr una simbiosis entre lo ritual y lo utilitario, que se traduce en un perfecto equilibrio con el medio ambiente que lo circunda. Igual al miedo y valentía que pudo sentir Jesús en ese momento, pero que no lo hizo dudar para dar su apoyo al buen ladrón.
XII.- JESÚS EN CRUZ, LA MADRE Y EL DISCÍPULO, Maritza Góngora. “Juan somos todos”
“Junto al madero de tormento, Jesús, al ver a su madre y al discípulo a quien él amaba, de pie allí cerca, dijo a su madre: ‘Mujer, ¡ahí está tu hijo!’. Entonces dijo al discípulo: ‘¡Ahí está tu madre!’. Y desde aquella hora el discípulo la llevó consigo a su propio hogar”.
Tan solo unos momentos antes de entregar su vida terrestre, Jesús, por amor a su madre, María, y por su interés en el bienestar de ella, la confía al cuidado del amado apóstol Juan. Jesús nos deja a todos su madre, nos la confía como a Juan, como nuestra madre también. Para cuidarla, escucharla, María representa la maternidad universal.
Juntos personifican a la Iglesia, aunque de manera diferente. Juan, el discípulo amado simboliza a los “discípulos de Jesús” como a todos los creyentes, y en este sentido, a toda la Iglesia. María, la madre de Jesús, simboliza a la Iglesia misma en su función materna.
En mi interpretación, el discípulo, Juan es un marco donde podemos poner nuestros Rostros.
He utilizado Rostros de mi Vida, Rostros conocidos y desconocidos. La imagen no tiene límite, es continua ya que no hay límite de rostros, ni de colores: SOMOS TODOS, TODOS ESTAMOS ALLI…... TODOS SOMOS JUAN.
XIII.- JESUS MUERE EN LA CRUZ, Luisa Dunia. “Pietá Pietá”
María y su hijo, representados por la Piedad de Miguelángel, están situados frente a la Cruz, y María, símbolo de las madres del mundo, hace suya esa cruz que como una cascada detrás de ella la corona.
Para realizar mi interpretación de la a XIII estación, momento en el que Jesús muerto es entregado a su madre, tomo dos elementos ya preexistentes: la Piedad de Miguelángel, obra escultórica de mármol, icono emblemático del renacimiento, que combino con uno de mis trabajos en vidrio, realizo así una postproducción, al componer un elemento renacentista, con un elemento artístico actual y los uno para dar forma a mi personal interpretación de una de las estaciones de la Vía Sacra, realizando una tercera imagen, creada con dos elementos que tuvieron origen en tiempos distintos, para situaciones disimiles y bajo condiciones distintas.
Obtengo con mi interpretación, un nuevo significado a partir de la selección de elementos ya dados. De este modo reprogramo el escenario en el que esta estación en especial y la piedad en particular permanecen en el bagaje cultural del imaginario colectivo.
XIV.- JESUS ES SEPULTADO. Manuela Moreira. “Sepulcro”
“Ni la piedra del sepulcro pudo opacar su luz” Toda cosa o ser existente viene a cumplir su misión que es el deseo de Dios, que brillará donde tenga que brillar, como Jesús lo hizo…..así es y será por siempre.
XV.- JESUS RESUCITA. Eddy Chacón. “Al Tercer día”. (Artista invitada)*
Esta pieza muestra la imagen de un corazón humano coloreado (imagen digital intervenida).
Esta pieza alude al momento de La Resurrección de Jesús, acontecimiento clave de la doctrina cristiana.
La Imagen del corazón es una representación de la vida en el Hombre.
Un corazón es, tanto que órgano vital, el órgano que alberga el principio de la vida, el vigor y la fuerza.
Para la religión católica Jesús resucitado no es un alma inmortal, ni un fantasma. "Es un hombre completo, con cuerpo, vivo, concreto que ha sido liberado de la muerte, del dolor, de las limitaciones materiales, con todo lo que constituye su personalidad"
Esta pieza ofrece una metáfora que representa la fuerza creadora, la fuerza divina que es capaz de accionar de nuevo a Jesús y llevarlo a la vida definitiva, esperanza por demás de todos los cristianos.
